El objetivo es impulsar en España nuevas formas filantrópicas de ámbito territorial siguiendo un modelo de reconocido éxito internacional: las fundaciones comunitarias

La Asociación Española de Fundaciones (AEF) ha abierto este lunes la I Convocatoria del Programa de apoyo a la creación de Fundaciones Comunitarias.

Las Fundaciones Comunitarias (FC) son organizaciones no lucrativas cuyo fin es fortalecer y articular la comunidad en la que trabajan –localidades, comarcas, pequeñas ciudades o barrios– canalizando recursos y competencias para la resolución de necesidades e iniciativas de interés común a dicha comunidad.

Las FC tienen creciente presencia en todo el mundo y ayudan a personas, empresas e instituciones a mejorar la vida en su comunidad. La AEF cree que hay muchas personas y organizaciones que aman el lugar donde viven y que quieren contribuir al bienestar de su comunidad. Es misión de la AEF defender y promover las fundaciones como una forma de mejora de nuestras sociedades, nuestro bienestar y nuestros territorios.

Las FC forman un movimiento global, pero no hay dos FC idénticas, porque todas ellas están adaptadas a la historia, a la cultura, y a las tradiciones locales, en la búsqueda de soluciones conjuntas a los problemas de su propia comunidad, en el aprovechamiento de oportunidades, y en un determinado contexto histórico, geográfico y social, que son siempre únicos.

Las Fundaciones Comunitarias de todo el mundo sí que comparten cuatro capacidades básicas, que deben alcanzar durante sus primeros 1.000 días de vida y que son las que les permiten involucrar a las personas de la comunidad y aportar recursos de manera ágil, transparente, eficiente e inclusiva para contribuir a la solución de los múltiples retos a los que nos enfrentamos.

Esas capacidades son: saber escuchar a la comunidad, saber entregar recursos a las organizaciones locales, saber ser útiles para las personas y organizaciones donantes y saber comprender las necesidades y oportunidades que enfrenta la comunidad. Son fundaciones que acogen la diversidad y se nutren de la participación de todas y todos.

Internacionalmente se considera como “comunitaria” a aquella fundación que se caracteriza porque:

>> contribuye a mejorar la vida de las personas en un ámbito geográfico limitado a lo local y claramente definido (típicamente, un barrio, una ciudad o una comarca)
>> presta atención a una gran diversidad de temas, con enfoque sistémico y colaborativo y con liderazgo
>> actúa primordialmente concediendo apoyo financiero, sobre todo a otras entidades sin ánimo de lucro; para abordar toda una serie de necesidades y oportunidades que se presentan en cada momento histórico a su comunidad
>> está regida por un patronato independientes de poderes políticos o económicos, reflejando la diversidad de su comunidad
>> obtiene recursos de un amplio espectro de donantes, en su mayoría locales (individuos, empresa, ayuntamientos etc) que pueden ser económicos, tiempo o conocimiento
>> tiene compromiso con la construcción de fondos permanentes, estables, y conocidos públicamente, que permitan un flujo estable e independiente de recursos de la comunidad para la comunidad
>>
ayuda a donantes a conseguir mejor sus objetivos filantrópicos, y promueven activamente la filantropía
>> fomenta la cohesión de la comunidad, ayudando a ésta a decidir estratégicamente sobre sus necesidades y el modo de abordarlas, en colaboración las organizaciones de la zona
>> promueve activamente la equidad y la construcción de capacidades sociales y de capital social
>> desarrolla políticas y prácticas abiertas y transparentes en relación con todos los aspectos de su actividad, rindiendo cuentas públicamente con regularidad

¿A quién va dirigido el Programa de apoyo a la creación de Fundaciones Comunitarias?

Pueden participar personas físicas, asociaciones, fundaciones, empresas y/o entidades empresariales privadas o de la economía social, y excepcionalmente entidades públicas, que deseen promover y constituir una fundación comunitaria, es decir, una organización privada, no lucrativa, siguiendo un innovador modelo internacional, para ayudar al desarrollo de su territorio de referencia (típicamente, una localidad, una comarca, o un barrio de una gran ciudad).

 Eventualmente, podrán participar fundaciones ya constituidas que, por su trayectoria y vocación, quieran evolucionar a ser fundaciones comunitarias. 

¿Qué se consigue con el apoyo del Programa de apoyo a la creación de Fundaciones Comunitarias?

La AEF ayudará y acompañará a los seleccionados para conseguir:

• Constituir la fundación o refundarla
• Definir el plan de viabilidad y el plan estratégico de la fundación
• Establecer el programa de impacto y los indicadores de medición
• Capacitar a sus gestores para la gestión avanzada de una fundación comunitaria
• Perfeccionar los procesos de recaudación de fondos, de activación de recursos locales y de escucha e identificación de necesidades y soluciones
• Participar activamente en la Comunidad nacional e internacional de fundaciones comunitarias, en eventos y en visitas de estudio
• Cofinanciar los gastos de funcionamiento del primer año, una vez constituida o refundada la fundación: se proporcionará, como máximo, la mitad (pero no más de 15.000 €)

Más información en la web de la AEF >>