Trabajadores de una fábrica
El empleo precario afecta en menor medida a los graduados en FP de Grado Superior, mejorando algunas cifras de graduados universitarios
Los titulados en FP son los trabajadores menos afectados por la precariedad laboral, según refleja el estudio FPAnálisis elaborado mensualmente por Dualiza-Fundación Bankia y Orkestra Instituto Vasco de Competitividad dentro del Observatorio de la FP.
El análisis se ha centrado este mes en la situación que atraviesan los jóvenes con el empleo en nuestro país, desvelando que el grado de precariedad laboral es, de media, inferior en los titulados de FP que en ninguna otra formación. Esa media, sin embargo, esconde que la FP Básica es la más afectada por la precariedad, mientras que el Grado Superior es el menos afectado, mejorando incluso algunas cifras de quienes tienen estudios universitarios.
Además, este estudio desvela que el 65% de los graduados en FP están trabajando a los cuatro años de terminar los estudios. La cifra, no obstante, varía enormemente dependiendo de la familia profesional escogida, siendo las industriales las que mejor porcentaje de empleabilidad mantienen.
En la actualidad, España, con un desempleo juvenil del 38,3%, ocupa el peor puesto en el ranking de los procesos de transición de la etapa formativa a la laboral en los diferentes países de la UE, muy alejado de la situación de países como Alemania (7,5%), Chequia (8%) o los Países Bajos (9,1%). Además, el empleo al que se accede ofrece unos niveles de temporalidad y de parcialidad muy elevados.
En esta tesitura, que de partida es muy negativa, los datos indican que la FP puede, efectivamente, actuar como palanca para mejorar la situación de los jóvenes en el mercado laboral, especialmente frente a niveles formativos inferiores. Aun así, no se puede tomar a la FP como una realidad homogénea ya que cada nivel de FP (Básica, Grado Medio y Grado Superior) y cada familia profesional y ciclo ofrece comportamientos diferenciados en términos de inserción en el mercado laboral.
La tasa de desempleo juvenil es inversamente proporcional al nivel formativo
Como norma general, se observa que la tasa de desempleo juvenil aumenta en la medida que desciende el nivel formativo. Esta es muy similar para los estudios universitarios y para la FP de Grado Superior. En el nivel intermedio, ocupado por el Bachillerato y por la FP de Grado Medio, es la FP la que presenta una tasa más baja. Finalmente, la tasa de desempleo para aquellos estudios de menor nivel crece notablemente. Esto indica que actualmente, el logro de, al menos, la educación secundaria superior, se ha convertido en un requisito mínimo para acceder al empleo con ciertas garantías.
Otro elemento que refuerza el argumento es que en España, las ofertas de trabajo que buscan perfiles con FP de Grado Medio han crecido 7 puntos desde 2015, mientras que en el caso de la FP de Grado Superior supusieron 1 de cada 4 ofertas en 2019.
Papel de los modelos formativos en alternancia
Además, es relevante resaltar que durante los últimos años se ha evidenciado que los países con sistemas de formación profesional de alto rendimiento son muy eficaces a la hora de integrar a los alumnos en el mercado laboral y abrir vías de aprendizaje y crecimiento personal. Una forma de hacerlo es mejorar el aprendizaje basado en el trabajo y reforzar los vínculos con el sector privado. En contraste con el aprendizaje exclusivamente escolar, los programas que combinan de escuela y trabajo proporcionan al alumnado una comprensión única del lugar de trabajo. En España, aunque los modelos formativos en alternancia están en fase de desarrollo, todavía ofrecen mucho margen de crecimiento.
Finalmente, es necesario recalcar que la FP es un factor más para combatir un problema de la magnitud que tiene el desempleo juvenil en España. Se necesitan intervenciones desde distintas perspectivas, como la regulatoria, la socio cultural y la empresarial.•••