Fundación Cepsa inicia su actividad en 2016 para canalizar la acción social que venía desarrollando Cepsa, su fundadora. Su objetivo fundamental es promover y mejorar el bienestar de las personas y comunidades en las que la compañía tiene una actividad relevante. Para ello, impulsa iniciativas que ayudan a personas y colectivos en situación de vulnerabilidad, adaptándose a las necesidades de cada población. En España, Fundación Cepsa está presente en Andalucía, Canarias y Comunidad de Madrid y a nivel internacional en Portugal, Argelia, Colombia y Perú.

En 2021, Fundación Cepsa reorientó su actividad e inició un modelo de trabajo con mayor énfasis en la sostenibilidad, posicionando a la transición ecológica justa e inclusiva como prioridad transversal de sus principales ámbitos de actuación: Social, Medioambiental y Científico-educativo. Todo con el fin de acompañar a la sociedad en la transición energética y no dejar atrás a ningún colectivo vulnerable.

Este posicionamiento está alineado con el plan estratégico para 2030 de Cepsa, Positive Motion, para convertirse en líder de la movilidad y la energía sostenibles en España y Portugal, y ser un referente de la transición energética. En este sentido, este año la compañía ha convertido en sostenible su crédito sindicado de 2000 millones de euros, vinculándolo por primera vez a indicadores de reducción de emisiones de CO2 y diversidad de género. Además, Cepsa se ha comprometido a donar el 50 % del ajuste de intereses a Fundación Cepsa para el desarrollo de sus proyectos.

Para reforzar el compromiso social de Fundación Cepsa, gestionar de manera positiva su impacto y contribuir al desarrollo sostenible, la entidad está comprometida con los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) de Naciones Unidas a los que contribuye con sus proyectos sociales, medioambientales y científico-educativos.

En 2021, impulsó un total de 158 iniciativas a las que destinó cerca de 2,7 millones de euros. De esta forma, y gracias a la colaboración con 167 entidades del tercer sector, se mejoró la calidad de vida de cerca de 116.500 personas de forma directa y casi 350.000 de forma indirecta.

APOYO SOCIAL PARA FAVORECER EL BIENESTAR DE COLECTIVOS VULNERABLES

En el ámbito Social se pusieron en marcha 108 iniciativas, con 122 entidades, orientadas a favorecer el bienestar de colectivos vulnerables, impulsar a la sociedad hacia una movilidad y energía sostenibles, apoyarla en situaciones de emergencia social y climática, promover la producción y consumo responsables e impulsar campañas de sensibilización a través del voluntariado corporativo.

El proyecto más destacado fue la XVII edición de los Premios al Valor Social, unos galardones que reconocen propuestas que impulsan la inclusión de personas o colectivos menos favorecidos. Desde su creación, en 2005, han destinado cerca de cuatro millones de euros que han hecho posibles 424 iniciativas sociales.

Los Premios al Valor Social fomentan la inclusión y reconocen proyectos con una contribución positiva a la transición ecológica

En 2021 reconocieron 39 proyectos de entidades de España, Portugal, Colombia y Brasil. Por primera vez, la valoración de las iniciativas incluyó su carácter sostenible y contribución a la transición ecológica, a través del fomento de las energías renovables, eficiencia energética, movilidad de bajas emisiones, protección de la biodiversidad o sensibilización medioambiental, entre otros aspectos.

En este sentido, se premiaron proyectos como la implantación de una electrolinera gestionada por personas con discapacidad intelectual (Fundación Aprocor, Madrid); fomento del empleo de personas con discapacidad intelectual mediante el compostaje de residuos orgánicos (Fundación Juan XXIII, Madrid); o talleres de reciclaje y reutilización de bicicletas para personas con problemas de adicción o exclusión social (Coordinadora Despierta, Campo de Gibraltar).

En 2021 también se dio respuesta  a las demandas surgidas por situaciones extraordinarias como la erupción del volcán de la Palma, colaborando con Cruz Roja en el apoyo psicosocial a las personas afectadas.

A nivel internacional, en Colombia se ayudó a familias necesitadas de la región de Caracara recuperando actividades agropecuarias y disminuyendo la dependencia del petróleo y en Perú, se mejoró la red vial e infraestructuras comunales en distintos distritos.

Dentro del programa de voluntariado corporativo Voluntas, se participó en acompañamiento telefónico a personas mayores, orientación en la búsqueda de empleo a jóvenes en riesgo de exclusión, así como fomento de vocaciones STEM en hijas de empleados, entre otras actividades.