Ponentes del simposio científico sobre levaduras en la Fundación Ramón Areces

El genetista estadounidense Jef Boeke, creador del primer cromosoma sintético de la levadura, en la primera conferencia del simposio científico que organiza la Fundación Ramón Areces en Madrid

 

Madrid. 23 de enero de 2020.
La levadura, un elemento inseparable de la historia de la alimentación humana, también tiene un papel destacado en los descubrimientos biológicos más allá de la repostería o la elaboración de cervezas. “Las levaduras son los aliados impensados o inesperados en los estudios sobre diversas patologías, entre ellas el cáncer”, ha explicado esta mañana el genetista estadounidense Jef Boeke, creador del primer cromosoma sintético de la levadura. El director y fundador del Instituto de Genética de Sistemas en el Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York ha dado la primera conferencia del simposio científico que organiza hasta mañana viernes la Fundación Ramón Areces en Madrid. Esta reunión, a la que acuden investigadores de España, Francia, Países Bajos, Reino Unido y Estados Unidos, se propone actualizar y poner en común los resultados conseguidos hasta ahora en este campo, a medio camino entre la Biología de sistemas y la Biomedicina.

“La resíntesis de todos los cromosomas de la levadura abre nuevas perspectivas en genética basadas en la modificación global de los genes y el número de copias de estos. La humanización de la levadura añade nuevas pautas metabólicas y regulatorias para el desarrollo de este microorganismo”, ha añadido Boeke.

“Varios premios Nobel, el último en 2016, han reconocido a científicos que usaron la levadura como material de estudio en sus investigaciones. Este microorganismo ha sido un importante banco de pruebas en las ciencias de la vida. El uso de la levadura para estudiar funciones de genes humanos y procesos patológicos la ha colocado en una posición preeminente en estudios de Biomedicina”, ha recordado Carlos Gancedo, uno de los coordinadores de este simposio, en su inauguración.

Por su parte, César Nombela, ex presidente del CSIC y coordinador de este encuentro científico, ha añadido que “la creación de cromosomas sintéticos modificados de levadura, incluso condensando toda la información genética de 16 cromosomas en uno o en dos, supone una auténtica reescritura de su genoma”.

Durante estos dos días, se van a presentar igualmente nuevas informaciones sobre el crecimiento y la proliferación celular de las levaduras, las estructuras nucleares y citoplásmicas que los controlan y su interacción con el medio externo. “La identificación de señales de este medio y el conocimiento de mecanismos de acción que pueden provocar alteraciones en la proliferación celular permitirían una mejor comprensión de los fenómenos que conducen al cáncer en las células de animales”, explica Gancedo. “También se tratará de cómo en la levadura se pueden reconstituir vías controladas por oncogenes humanos o los complejos estructurales que determinan los procesos inmunitarios”, añade.

Los investigadores que pasarán hasta mañana viernes por la Fundación Ramón Areces también van a presentar avances en el conocimiento de la biología molecular de algunas levaduras patógenas responsables de infecciones sistémicas con elevada mortalidad, así como el fenómeno del pluriempleo de proteínas (moonlighting), cuya implicación en patologías es cada vez más relevante.

La contribución de la levadura a la mejora del medioambiente estará representada por estudios actuales sobre mejora de estirpes de levadura para la producción de un biocombustible como el etanol a partir de materiales lignocelulósicos.

El conjunto de las presentaciones del simposio muestra pues, una serie de nuevos conocimientos con potenciales impactos en la salud y la calidad de vida. El simposio se dedica a la memoria del Profesor Julio Rodríguez-Villanueva, pionero de la Microbiología fundamental en España, creador de una escuela científica y académica así como vicepresidente del Consejo Científico de la Fundación Ramón Areces. •••