El Centro de Formación para el Empleo de FUNDACIÓN JUAN XXIII , entidad que lleva más de 55 años trabajando para la inclusión social y laboral de personas en situación de vulnerabilidad psicosocial, especialmente con discapacidad intelectual y/o enfermedad mental, cierra la primera etapa de su 13ª promoción con la graduación de 100 alumnos/as , estimándose que en diciembre de 2023 el número de alumnos alcanzados durante este año será de más de 300.
El objetivo de este Centro de Formación para el Empleo (CFE) es ofrecer a personas con discapacidad intelectual la formación adaptada y necesaria para optar a un puesto de trabajo cualificado. De este modo, se consigue aumentar sus oportunidades de inserción en el mundo laboral en ámbitos variados y especializados, en los que históricamente han tenido poca presencia.
Con 13 años de trayectoria, el CFE se ha convertido en referente estatal con una oferta de 17 cursos, 8 de ellos con certificación oficial. Con una tasa de inserción laboral del 41% , se estima que este centro ha logrado que más de 700 personas con discapacidad intelectual y/o enfermedad mental, se integren en el mercado laboral, ya sea en la propia Fundación o en empresas externas. Además, se caracteriza por su carácter innovador en la búsqueda de nuevos itinerarios formativos según las demandas del mercado de trabajo para ofrecer una experiencia formativa de calidad y adaptada a sus necesidades.
El alumnado de esta 13ª Promoción se ha formado en diversas áreas como pastelería, xerojardinería, auxiliar técnico deportivo, almacén y última milla, compostaje, actividades auxiliares en viveros, jardines y centros de jardinería, operaciones auxiliares de grabación de datos y documentos, imagen personal y cashkeeper.
En palabras de Alberto Muñoz, gerente del CFE: “la formación es clave para poder acceder a un mercado laboral cada vez más exigente y competitivo. En esta línea, el Centro de Formación para el Empleo de Fundación Juan XXIII es pionero en ofrecer soluciones formativas adaptadas a personas en situación de vulnerabilidad psicosocial, prestando especial atención a las personas con discapacidad intelectual”.
Además, ha destacado que es un orgullo para esta entidad que casi la mitad de los alumnos que han pasado por sus aulas a lo largo de todos estos años se hayan insertado laboralmente, pero ha hecho hincapié en que “aún quedan muchos retos por abordar a nivel sociedad para garantizar que todas las personas puedan tener acceso a una formación para el empleo de calidad y, sin duda, en los próximos años vamos a ir a por ellos”.
El desarrollo de estas formaciones es posible gracias al apoyo de diversas instituciones, como la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo, que lo hace a través de subvenciones de formación para personas en situación de desempleo y de los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (Next Generation EU), Fundación ONCE, el Fondo Social Europeo y empresas privadas patrocinadoras.
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